A 50 años... como si fuera ayer

50 años después... tan frescos como aquel entonces

Por la madrugada del 7 de julio de 1940 nace Richard Starkey (Ringo), en la tarde del 9 de Octubre de 1940 Johnn Winston Lennon (John Lennon), el 18 de junio de 1942 James Paul McCartney y por último, George Harrison el 25 de febrero de 1943 (el pequeño George de Speke -calificativo que le ponía de malas-).

John comenzó a tocar en la banda de su escuela junto con unos amigos (Len Garry, Ken Griffith, Pete Shoton e Ivan Vaughan) uno de los cuales (Ivan) más adelante le presentaría con Paul, con quien claro está congenió muy bien e iniciaron su trabajo musical que, en aquél entonces dejaba muchísimo que desear pues solo parecían fantasear como todo musico en sus inicios con una banda de Skiffle. Al poco tiempo conocieron a George, un chiquillo tan desesperado por aprender a tocar su guitarra que se la pasaba renegando diciendo que jamás lo lograría (afortunadamente tenía una madre fantástica que siempre le estaba animando), y no era para menos pues en los 50's para la clase baja o media lo más sencillo era pegarse al radio para lograr sacar una canción.

John, Paul y George eran "Los Quarrymen" y con ellos eventualmente tocarían Pete Best y Stu Sutcliffe pero antes de ello, pasaron por nombres tan bizarros como corrientes tales como Moondogs, Rainbows, Silver Beatles y finalmente Beatles. Esto ocurrió cuando Stu se adhirió a la banda e iniciaron una gira de principiantes como teloneros en Escocia. Nada del otro mundo, de hecho era una vil caravana de artistas medianos para cubrir salones de baile en Glasgow y su circuito de provincias pero poco mas. En sí comenzaron a llamarse Beatles en firme poco después de emigrar temporalmente a la pervertida ciudad de Hamburgo. Esto fue por una invitación de Allan Williams, promotor, que ya había llevado a Rory Storm y su banda en la que Ringo Starr tocaba la batería. Por ese entonces incluso Rory veía a los Beatles como una banda común y corriente, de hecho mas corriente que común pero en virtud de la amistad que llevaba con George no hizo mayor aspaviento, sin embargo ciertamente siempre los menospreció bastante mientras estuvieron en Hamburgo.

Los ires y venires de los Beatles en Hamburgo merecen capítulo aparte sin embargo es bueno mencionar que para esta "Gira" John y Paul invitaron a Pete Best -hijo de la propietaria del café en el que tocaban mientras estaban en Liverpool (el Casbah Club)- quien era tan serio y calmado que no representaba problemas para la inquieta forma de ser de John, la vanidosa forma de ser de Paul y la intransigente e irónica forma de ser del entonces todavía adolescente George. Con Pete incluso formaron un buen equipo pero es verdad que su personalidad estaba lejos de ser Beatle inclinada mas hacia la tradición "Presley" de ropa de cuero y cabello grasiento peinado en copete. Pete era un rocker con todas las de la ley en tanto los otros cuatro (John, Paul, George y Stu) probaban casi siempre cosas nuevas, lamentablemente también los estupefacientes por moderados que fueran asunto que los confinó en cierto modo a cierta dependencia que, si bien se vio reflejada en su creatividad posterior, también dañó mucho sus relaciones personales a futuro. Los otros tres eran bastante mas MODs.

Resultaría un tanto necio y repetitivo hacer un refrito mas de la archirrebuscada (y en muchos casos hasta mejorada) biografía de los Beatles de la que se han dicho verdades a medias y demasiadas mentiras (caso concreto Sergio Sepúlveda de TV Azteca quien dice demasiadas inexactitudes cada vez que se refiere al cuarteto o a alguno de ellos), resultaría aburrido y hasta oportunista mencionar la cantidad de drogas y los muchos excesos de los cuatro jóvenes provincianos que hicieron bingo a través de un agudo empresario heredero de un imperio comercial en Liverpool (Brian Epstein) así como lo inexpertos que eran al principio y lo expertos que nadie mencionó luego si se convirtieron o no pero, ¿por qué pocos mencionan certeramente el legado por sí mismo que benefició desde el principio a una economía decadente como lo era la británica en los primeros años sesenta?. Retomando precisamente aquellos años en los que los Beatles regresaron derrotados de Hamburgo parece existir una abismal diferencia entre aquel grupo y el grupo que hoy vende millonarias sumas tan solo por mercancía de culto.

El periodo comprendido entre 1959 y 1960 es probablemente el mas menospreciado pero en realidad debería ser el mas crucial para que todo eso funcionara. Si alguien no sabía el detalle, John Lennon era muy hábil para las sutilezas y la logística y prueba de ello fue apreciar que Pete Best era probablemente quien podría convertirtse en una piedra en el zapato para el grupo toda vez que, a diferencia de ellos, era un sujeto bien parecido, adinerado y con suerte en los negocios lo que podría confinar la presencia de los otros a un plano secundario (y esta teoría no es tan incierta, está comprobado que muchos miembros de perfil bajo en bandas exitosas suelen tener a la larga mas seguidores que las figuras principales, tal es el caso de John Entwistle de The Who y Freddie Mercury de Queen -en esta banda el líder era el baterista Roger Taylor-). Mucho antes de que echaran a Pete Best de la banda había incluso una alta probabilidad de que el grupo ni siquiera siguiera tocando dado que todos tenían problemas en casa y desde luego problemas financieros. Los Beatles en 1960 seguía siendo una agrupación de chamacos que aún dependían de la economía paterna y estaban muy lejos de ser rentables como espectáculo. En ese periodo regresaron a Hamburgo en donde Stu dejó de tocar el bajo -que además ni siquiera tocaba bien- y se casó con la fotógrafa Astrid Kirchherr quien hasta ese momento era la única persona de respetable nivel que había tomado en serio y artísticamente hablando a Los Beatles, el mejor potencial fotográfico de los chicos lo obtuvo Astrid mucho antes de su fama. Stu dejó la banda y había pasado dos años soportando las mezquindades del ego de Paul (que peleaba por la atención del líder John) y el incisivo humor negro y abusivo de George. En abril de 1962 murió Stuart y ahora es conocida a detalle la manera en que Astrid fue a recibir a John, Paul y el aún baterista Pete al aeropuerto de Hamburgo y les dio la noticia y es probablemente cierto preludio de ambiente enrarecido que por un lado parecía arrojar tragedias a Los Beatles en ese periodo pero ya habían realizado tratos y contrato con Brian Epstein. Terminaba aquella época de penas, hambres y pequeñas glorias de los días duros de Hamburgo-Liverpool y ahora Brian los llevaba poco a poco por otro peregrinar, esta vez con mas clase y con nuevos rostros y gentes. Estaban ya en un nivel superior al anterior y esta vez ya tenían un poco de dinero en sus bolsillos, dinero ganado por ellos mismos.

1962 marcó varias cosas al mismo tiempo como fue el recibir portazos de disqueras mayores y menores y hasta casas disqueras mediocres que se daban el lujo de mandar por un tubo a todos aquellos chicos que salían del Skiffle para tocar Rock and Roll elvisiano que ya comenzaba a fenecer (mucho de ello debido a las trágicas caídas de figuras como Buddy Holly y Richie Valens en 1959). Londres y sus empresarios no parecían quererse arriesgar con cuatro norteños del puerto mas desacreditado del país ni mucho menos, pero un golpe fortuito llevó aquellas cintas magnéticas de Brian Epstein al estudio de Parlophone y a las manos del productor encargado, George Martin, quien con muchas dudas los audicionó en junio de ese año y adelantó un poco la probabilidad de hacerles un disco en forma dependiendo de muchas cosas. Aunque de manera un tanto arriesgada, George Harrison comenzó a promover la salida de Pete Best para colocar a Ringo en su lugar, jugada que los otros dos apoyaban pero no se atrevían a encarar ni a manifestárselo a Brian. En agosto se salieron con la suya, Pete fue echado del grupo y Ringo llamado a filas. Resultaría exagerado decirlo pero mucho de lo que pesó sobre la decisión fue el físico de Pete y su negación a la nueva imagen del grupo. Con Ringo en la banda habría un miembro que, por sujetarse a las reglas, acataría las imposiciones y además sería menos atractivo que los tres miembros frontales. Resulta irónico que hoy por hoy Ringo tenga muchos mas fans de lo que ellos esperaban.

Mencionar desde el primer hit, "Love me do" y toda la histeria que llegó con la beatlemanía (cosa que no se ha repetido en la historia de la humanidad ni con el nefasto Michael Jackson aunque sus publicistas insistan en lo contrario) sería tanto como repetir una vez mas lo que por cincuenta años ya se ha dicho bien o mal pero que ya es muy conocido por todo beatlefan que se precie de serlo. Lo cierto es que el periodo de giras desde la gloria nacional hasta su conquista de Estados Unidos fue algo que los tomó tan de sorpresa que, en menos de dos años (de diciembre de 1962 a febrero de 1964), los Beatles habrían pasado de los provincianos tocando puertas sin respuesta, al espectáculo musical mas rentable y codiciado del mundo así como los jóvenes "solteros" mas deseados por las entonces adolescentes de todo el mundo. Hacia 1965 los Beatles, como buenos nuevos ricos, disponían de las mejores cosas en el mundo pero también se habían esclavizado a la maquinaria que producía dinero y los exprimía hasta la útima gota de sudor trayéndolos de un lado a otro del mundo sin oportunidad de salir a respirar un poco. Claro, también debería mencionarse que, esclavizados y todo, no dejaban de tener poder y dinero lo que les procuraba mujeres, alcohol, drogas y todas las cosas que el dinero permite comprar, incluso influencias. Pocos saben que los Rolling Stones sufrieron ciertos bloqueos en sus inicios por parte de los Beatles hasta que Brian Epstein negoció con Andrew Low Oldham, manager de los Stones por ese entonces, ciertos lugares de conciertos y la manera en que ambas bandas lanzarían sus discos. De hecho la canción "I wanna be your man" fue parte del pacto, los Stones tenían que tocar una canción Beatle a manera de reconocimiento por parte de los Stones de que aquellos eran los soberanos de la escena en ese momento. La cruda verdad es que la versión de los Stones a esa canción resultó superior a la que los Beatles lanzaron poco después. Si bien los Beatles eran un grupo armónicamente bien estructurado y Paul era bastante capaz, Brian jones, de los Stones, era un músico tan completo que era técnicamente superior al resto de mùsicos tanto de una como de la otra banda.

Dentro de esa caja de oro con excesos y cansancio, Los Beatles glorificaron cada lugar pero también conocieron la derrota y hasta la angustia cuando Imelda Marcos, la primera dama filipina por esos años, tramposamente quiso aprovecharse de la presencia del grupo en Manila y explotarlos invitándolos a un desayuno del que el agente de prensa del grupo nunca se enteró (estúpidamente Imelda asumía que TODO el mundo debía adivinar sus decisiones como por arte de magia) por lo que la banda jamás atendió la "invitación" y por lo mismo fueron echados violentamente del país sin poder cobrar la actuación y casi bajo riesgo de ser encarcelados de manera ilegal por la pareja presidencial que, años mas tarde, resultaría un par de probados criminales. Filipinas es la nota negra dentro del esplendor de la historia Beatle.

En 1966 dejar las presentaciones en vivo resultaba una arriesgada decisión cuando se estaba creando un imperio comercial como lo eran (y aún lo son) Los Beatles pero, contra las insistencias de Brian Epstein, el grupo decidió dejar a su público antes de que este los dejara a ellos y el tiempo ha probado que la decisión fue la mejor que pudieron haber tomado como grupo comercial vendediscos, la meta siguiente era consagrarse como banda de rock y el rompimiento con los trajes formales y la imagen de niños limpios se colocó en la portada mas ambiciosa y revolucionaria en la historia de la mùsica: Sergeant Pepper's Lonely Hearts Club Band, considerado hoy en día como uno de los mejores discos de Rock -a la par de su concepto gráfico-. En ese momento Los Beatles ya enfrentaban toda una maquinaria de Rock que emergía de las agresivas guitarras de Pete Townshend, Eric Clapton, Keith Richards y el mas hábil de todos, Jimi Hendrix quien tocó su versión de "Sgt Pepper's" un día antes del lanzamiento del disco.

1966 fue el nacimiento de Los Beatles como artistas de Rock pero también el comienzo del adios al sueño. La mercadotecnia de la beatlemanía había ayudado a cimentar eso pero las adolescentes que tres años atrás habían gritado histéricas ahora estaban en edad casadera o bien en formación profesional. En cualquiera de ambos casos, estas ya no estaban tan adheridas a la histeria provocada por sus ídolos. En 1967 se dieron muchos problemas que se dieron por menores pero que eventualmente comenzaría a agrietar la estructura del imperio. A ese punto Paul ya dominaba tanto la música como el trabajo en estudio y se empeñó en querer dirigir mucho de lo que se grababa en tanto John se enredaba con cuanta mujer famosa se pudiera hasta que terminó enredándose con Yoko Ono que se presumía como artista de Avantgard; George se metía en la religión budista y Ringo en la actuación. Fue hasta agosto de ese año que los Beatles tuvieron que asumir su propio futuro debido a la muerte de Brian Epstein y fue cuando el barco comenzó a hacer agua.

Es aquí donde conveine hacer la reflexión. Los Beatles resultaron algo mas que un cuarteto bien ensayado, algo mas que cuatro muchachos simpáticos y algo mas que un producto de venta. Puede haber quien lo acepte o no pero la música de los cuatro de Liverpool resultó derribar toda clase de barreras en parte por el tono optimista que, mal que bien, siempre conservó (incluso el Album Blanco es un tanto festivo a pesar de las angustiosas canciones de John) y en parte porque Los Beatles conservaron cierto toque de genuinidad que hasta el día de hoy pocos han conservado. Ellos nunca necesitaron trucos publicitarios ni aliarse en "Dúos" con ningún artista en cartel (por eso sus fans no perdonan a Paul sus estúpidas canciones con Michael Jackson). Lo cierto es que tanto el movimiento por la paz como el nacimiento de la generación moderna se tomó de la mano con la música de Los Beatles.

Las muertes de John y George son de las más tristes y trágicas en la historia de la mùsica pero su música creció mas así como su legado que los hizo clásicos contemporáneos muy por encima de quien se quiera nombrar, incluídos Elvis, Sinatra, Liberace, Pavarotti o quien quiera que se mencione. Nadie que haya hecho música en el siglo 20 podrá superar lo que esos provincianos del norte de Inglaterra lograron en solo ocho años de aquella loca década que marcó el parteaguas de la historia moderna, en parte gracias a ellos y su influencia artística reflejada en todos los artistas y bandas surgidos después de ellos.

A 50 años de iniciar su carrera musical, hoy "The Beatles" siguen sonando tan fresco como una mañana naciente y es que no hay medio de comunicación que no hable de estos geniales chicos. No hay en todo el mundo NADIE que no sepa, aunque sea de manera velada, quienes fueron Los Beatles y no hay banda de Rock moderna que no quiera al menos tocar una pieza de ellos. Saltan a la vista todas aquellas nuevas versiones a las canciones del cuarteto, muy pocas con fortuna para gustar cabe mencionar pero hasta el hacer una banda tributo a Los Beatles resulta ser hoy todo un arte.

Hoy, 50 años después, John, Paul, George y Ringo siguen siendo tan Beatles como en aquel entonces y su legado llegó para quedarse y crecer cada vez mas. Hoy no existe culto mas grande y real como el de ellos superando otra vez, como en los 60's al Elvis Presley, cosa que al Rey debe tenerle retorciéndose en su tumba como cuando quiso bloquearlos en Estados Unifos en aquel entonces.

¡¡¡¡Vivan Los Beatles!!!! (ahí tú disculparás Elvis)

Messy Blues (con información proporcionada por Quiet Oly)

Comentarios

Martin dijo…
Muy entretenida la nota y lista para levantar polémica. Creo, y pienso que muchos más, que lo del "pacto" entre los managers de los Beatles y los Rolling es poco creíble. Mas bien, el grupo comandado por Jagger necesitaba un empujoncito por parte de los Beatles. Saludos.
Messy Blues dijo…
Rd una verdad a medias. Pese a que soy Beatlefan de corazón y hasta la médula no dejo de aceptar que escénica y líricamente los Stones superaban por mucho a los Beatles. Es decir, compara "Got live if you want it" en vivo de los Stones con "Hollywood Bowl" de The Beatles y notarás la destreza de Jagger y compañía en tanto la gritería y pésimas instalaciones electrónicas proporcionadas a los de Liverpool denostaban las acartonadas actuaciones del grupo.

No digo que Stones sean mejor que Beatles pero desde luego Keith Richards y Brian Jones como guitarros estaban mas inmiscuídos en la música y la guitarra (y Jones era un experto en varios instrumentos) que John y George quienes, si bien tenían toda la experiencia, también se retrajeron mucho en muchas cosas que los Stones aprovecharon hasta el día de hoy que tienen setenta y tantos.

Bill Wyman es profesor de conservatorio, Charlie Watts baterista de Jazz y conocían con ojos cerrados el tejemaneje londinense de los grupos de rock y su manejo. Jagger, el supuestamente menos conocedor fue felicitado en persona por un Muddy Waters en ese entonces famoso y soberano cuando los Stones eran prácticamente desconocidos en tanto Lennon y McCartney eran asediados de manera oportunista por las estrellas del cartel, mas intetersados en el nombre que en el talento y la calidad.

Los Beatles fueron en su momento un producto de venta (aunque su música es de categoría muy superior a los productos actuales de venta) y su creador los peinó, bañó, pulió y vendió bien y bastante cotizados mientras a los Stones solo pudieron elevarlos convirtiéndolos en los malos del cuento. Digamos que fue un juego en el que Epstein tuvo mas capacidad, visión y experiencia mientras a los Stones nadie los manejaba hasta que llegó Oldham.

No, no creo que los Stones necesitaran ese empujoncito